Nuevamente estamos a pocos meses de que el tribunal supremo electoral “TSE” de el banderazo de salida al proceso electoral número siete a partir de la asamblea nacional constituyente de 1.985, durante este lapso de tiempo 1985-2011, han pasado por el ejecutivo siete partidos políticos de los cuales dos ya no existen y los otros se encuentran en un proceso de decadencia evidenciando así la volatilidad de los partidos políticos en nuestro país, que no son más que maquinarias electorales que ven en el aparato del estado un paraíso para realizar sus negocios y devolver a sus financistas lo que estos les han prestado durante la campaña.
De los seis partidos políticos que han hecho gobierno en este país, la mayoría han sido intrascendentes y han evadido las principales necesidades que tiene este país, pero también debemos de agregar que la falta de voluntad política que las elites –económicas, políticas e intelectuales- han mostrado a lo largo de nuestra historia es otro de los muchos causales que las políticas públicas en materia de salud, reducción de pobreza, educación, seguridad ciudadana etc, sigan brillando por su ausencia.
La actual coyuntura electoral se ha caracteriza por la poca propuesta y una gran cantidad de partidos políticos y candidatos que nos invaden con promesa que en su mayoría no son mas que falacias –ad populum- aunque el protagonismo por el momento se lo ha llevado Sandra Torres de Colom y Álvaro Arzú, con sus candidaturas ilegitimas, aunque en el primer caso ha existido una gran diversidad de interpretaciones jurídicas sobre si procede o no la candidatura de la señora Torres de Colom, la mayoría de juristas consultados asumen que no puede inscribirse, y por ello la pareja presidencial busco una salida legal al conflicto y hace unas semanas anuncia su divorcio.
Una encuesta realizada por la firma Borges & Asociados publicada recientemente por un diario local, ubican con un 47% de intención de voto al general Otto Pérez Molina, seguido de la señora Sandra Torres de Colom con un 13.7%, y según esta encuesta la tercera fuerza electoral seria el actual alcalde capitalino Álvaro Arzú y muy seguido el Dr. Eduardo Suger, aunque el alcalde Arzú declaro ante los medios de comunicación “que él no puede ser presidente, porque la constitución se lo prohíbe” y todo apunta a que su esposa Patricia de Arzú será la candidata por el partido unionista; aunque aun es muy temprano para saber quién será la tercera fuerza electoral, es posible que una alianza entre los partidos, VIVA , CREO y CASA logren consolidar una tercera fuerza electoral con posibilidades reales de llegar a una segunda vuelta aunque este escenario se visualiza muy complicado de lograrse.
A como se vislumbra el panorama electoral tendremos una muy probable segunda vuelta entre el partido patriota y la UNE, en este proceso electoral es innegable que es la primera vez en nuestra historia política que un partido tiene grandes posibilidades de reelegirse; esperemos que los partidos cumplan a cabalidad la ley electoral y de partidos políticos y así también el pacto de ética que firmaron entre ellos, y que tengamos un proceso electoral en el que prevalezca el debate y no falacias y mentiras a las cuales estamos acostumbrados.
Coincido con el editorialista de siglo 21 Manuel Villacorta “…que Guatemala necesita urgentemente la creación de un frente amplio democrático y progresista, que este integrado por: A).empresarios honrados porque ellos son actores importantes de nuestro sistema económico, B) Indígenas porque representan a una gran parte de la población guatemalteca y C) Intelectuales honestos que dirigirán las instituciones del estado…”
Como sociedad guatemalteca debemos de estar conscientes de la necesidad de lograr un pacto entre elites donde los principales actores de la sociedad sienten las bases de una Guatemala que logre revertir las cifras alarmantes en materia de salud, educación, seguridad y pobreza.